En el supuesto de que el mar llegara a la capital, sería con una separación de las Comunidades Autónomas por islas, para así independizarse. El método que emplearían sería el de colocar en un tambor dichas autonomías y comenzar a golpearlo para así separarlas aleatoriamente, sin que nadie diga que no hay mano inocente.
Así, sólo así, Madrid llegará al mar, y ni una sola porción de tierra será arrebatada a los nacientes estados: las Islas Ibéricas.